BOCADITOS DE SOLOMILLO DE POLLO ADOBADOS

 


BOCADITOS DE SOLOMILLO DE POLLO ADOBADOS

Nos gusta estos bocaditos para tomar una cerveza y a los niños acompañar con kétchup y mayonesa. Pero yo los preferíos comer así mismos, me encanta sentir los sabores que lleva en su preparación. El problema es que después de probar uno ya no puedes de parar, metes uno detrás de otro en la boca.

Es una forma muy fácil de hacer y la puedes preparar con adelantasion y en el momento solo freír en abundante aceite vegetal. También os aconsejo sacar los bocaditos sobre doble papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.

Con esté receta como otras que tengo en mi blog quiero animar a los jóvenes que se atreve a cocinar comidas caseras aun que sea muy fáciles, pero resultará caseras, sanas y sabrosas. Aconsejo a los jóvenes que procure de tener en la despensa algunas hierbas aromáticas y algunas especias que más le gusten. También va bien tener el pan rallado, la harina, los huevos, el aceite, ingredientes que suelen utilizar en general en las preparaciones de las comidas. También va bien tener en la nevera kétchup y mayonesa o alguna salsa que más de gusten.

Se debe empezar con platos sencillos, poco a poco. Si te empeñas en hacer algo tarde o temprano lo consiguieras sin duda, sin esfuerzo no se puede hacer nada. Es la ley de la vida, de sobrevivencia. Si no te sale la primera la segunda sin duda te saldrá mucho mejor. Si no estas muy seguro y tienes miedo, mejor empezar con las preparaciones a bajo fuego y si vez que empieza a tardar mucho subir el fuego poco a poco. Mejor fuego bajo o al medio que fuego fuerte y que solo consiguieras quemarse la comida y no confiar en ti mismo.

Personas: 2

Tiempo: 30 minutos

INGREDIENTES:

360 gr. pechuga de pollo sin hueso y sin piel

1 huevo grande

2-3 cucharadas harina común

granos pimienta negra

1/2 cucharadita ajo seco molido

1/2 raíz de jengibre seco molido

1 cucharada aceite de oliva virgen extra

2 tallos eneldo fresco

sal gruesa de roca

aceite de girasol para freír

PREPARACIÓN:

Cortar la pechuga de pollo en dados pequeños y colocar en un recipiente. Agregar sobre la carne el ajo y la raíz de jengibre en polvo. Picar los tallos de eneldo recién lavados y agregar sobre la carne. Moler granos pimienta negra al gusto y agregar la sal la cantidad necesaria y la cucharada de aceite de oliva virgen extra. Remover bien para que los trozos de carne se empape con los ingredientes añadidos.


Seguidamente, cascar el huevo en un bol y añadir una pizca de sal gruesa de roca. Emulsionar bien con un tenedor. Verter dos-tres cucharadas de leche sobre el huevo batido y incorporar poco a poco la harina, removiendo constantemente hasta la incorporación total. Debe tener un aspecto de nata espesa la masa.

Seguidamente, verter la masa de harina con huevo sobre los dados de pechuga de pollo y volver a remover bien. Tapar el recipiente y dejar reposar 30 minutos.


Pasados los treinta minutos. Verter abundante aceite de girasol en una sartén no muy grande y dejar calentar. Cuando el aceite sube de temperatura, con una pinza, añade por separado, cada dado de pechuga de pollo y deja cocinar. Cuando empieza a dorarse, sacar cada dado sobre papel de cocina que hemos preparado antes de empezar a freír.


Por ultimo, trasladar los dados de pechuga en gabardina a un plato limpio y sírvelos. Puedes acompañar 
el plato de una ensalada o unas hortalizas a la plancha como unos calabacines o berenjenas. A mis nietos les encanta con kétchup y mayonesa. 
 



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